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jueves, 31 de enero de 2008

Contaminación acústica en tierra, mar y aire (Mariano PLANELLS)

Diario de Ibiza - Opinión - Contaminación acústica en tierra, mar y aire (Mariano PLANELLS)

Hace muchos años que sé por experiencia propia que el ruido excesivo y prolongado tiene efectos nocivos y a veces devastadoras sobre la salud del ser humano.

Yo creo que todos los ibicencos que nos fijamos un poco conocemos este fenómeno, aunque no es algo exclusivo de nuestra isla. Casi son 160 los millones de habitantes de la Unión Europea que están expuestos a ruidos superiores a 65 decibelios.

Y que se sepa: el ruido mata. Puede llegar a matar. El ruido en exceso produce estragos en la salud humana.

Hemos tenido que esperar siete años del siglo XXI para que nos dieran a conocer el Mapa del Desastre de Ibiza y Formentera.

En tierra firme gozamos o sufrimos unos niveles de ruido intolerables, causados en su mayor parte por bares, discotecas y por la circulación. Sin olvidar el grato recuerdo de los aviones que van llegando cada tres minutos durante toda la noche, al menos en verano. Me refiero a quienes tienen el privilegio de vivir en la paradisíaca e infernal zona del Puig des Molins.

Aquello sí que es el corredor de la muerte: un trasiego imparable de aviones que salen y que entran a la pista. Parece la guerra de Corea con K. O parecía, porque no hay mal que cien años dure y donde vivo ahora no hay aeropuertos ni los necesito.

En noviembre del 2007 se presentó al mapa del ruido, el Mapa del Desastre.

Siempre queda la pregunta que se hace uno mismo poniendo cara de tonto: ¿pero tengo que aguantar yo esto?, ¿no tiene remedio esta situación?

Tiene remedio, pero se han de dedicar unas horas a la semana y los concejales de Medio Ambiente o de Interior parecen más ocupados en otras cosas o pidiendo informes (los del PSOE).

Talleres, casas de alquiler y particulares han de hacer uso de los artefactos silenciadores y amortiguadores homologados en toda Europa.

Los bares y las discotecas no sólo tienen un horario: durante todas las horas de todo el día no pueden emitir ruidos superiores a estos 65 decibelios y mucho menos que lleguen al exterior.

Lo de los aviones no tiene arreglo como no nos traigamos a los clubbers en barco o montados en globo.

Hoy no he comentado nada de la contaminación acústica bajo el mar. Pero cómo será que las ballenas prefieren embarrancar en la costa antes de seguir soportándolo.

También se ha presentado un mapa del ruido en el mar. Otro día, ¿sí?

martes, 3 de julio de 2007

Más ruido sobre sus cabezas...

Más ruido sobre sus cabezas · ELPAÍS.com

Unos 40.000 vecinos de 16 municipios de la región miran cada día hacía el cielo. Están preocupados por el ruido que hacen los miles de aviones que despegan y aterrizan en el aeropuerto de Barajas. El 88% de estos madrileños soportan cerca de 60 decibelios de sonido. El límite máximo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) es de 65 decibelios. En la zona afectada por la huella sonora hay 6.263 alumnos expuestos al ruido, en 19 colegios y 126 camas de un hospital privado, en Coslada.

El Ministerio de Fomento expuso el pasado viernes a información pública el mapa acústico del aeropuerto de Madrid-Barajas, que ocupa 1.925 hectáreas entre Alcobendas, Madrid y Paracuellos del Jarama. Este plano señala las zonas más afectadas por el ruido que provocan los cerca de 415.000 aviones que aterrizan y despegaron del aeródromo madrileño en 2005, ampliado en febrero de 2006 con la entrada en funcionamiento de la termina T-4 y sus nuevas pistas. Ahora los vecinos podrán presentar alegaciones a la huella sonora de Fomento. Pero el informe del ministerio ha sido elaborado con datos de 2005, anterior a la ampliación del aeropuerto. Entre febrero y abril de 2006, cuando se inauguró la T-4, hubo un millón más de desplazamientos por la nueva terminal que el año anterior. El estruendo provocado por las maniobras de los aviones ha crecido desde entonces.

Un portavoz de Aena remite al propio informe para explicarlo. "Se adoptan datos de 2005 por criterios de homogeneización con el resto de mapas estratégicos del ruido presentados", dice el informe. Aunque éste precisa que se ha tenido en cuenta la ampliación del sistema aeroportuario de Madrid, "ha sido necesario establecer un escenario de cálculo concreto". "La operativa -del estudio- se llevó durante agosto de 2005 hasta la puesta en marcha de las nuevas pistas en febrero de 2006", añade.

El nuevo mapa provisional, debe recoger las alegaciones de los vecinos, señala las zonas de conflicto. "En estas no se cumplen los objetivos de calidad acústica", según el informe. Las zonas más perjudicadas son la urbanización Prado Norte, en Algete; Belvis del Jarama, en Paracuellos; y el barrio de la estación, el colegio San Esteban y el hospital de Asepeyo, en Coslada. En San Fernando de Henares, el estudio considera que se superan el ruido en una agrupación de viviendas cerca de la urbanización próxima al polideportivo municipal y en el colegio San Fernando situado en el parque empresarial del mismo nombre.

En este mapa elaborado por Fomento aparecen 16 municipios que se ven afectados por los decibelios que provocan las aeronaves. Son: El Molar, Valdetorres del Jarama, Algete, Fuente el Saz, San Sebastián de los Reyes, y Cobeña, al norte de la región. Alcobendas, Paracuellos del Jarama y Madrid, en el entorno del aeropuerto. Y Coslada, San Fernando de Henares, Torrejón de Ardoz, Rivas-Vaciamadrid, Mejorada del Campo, Velilla de San Antonio y Loeches por el sur de la infraestructura aérea.

Según el informe, San Sebastián de los Reyes es el municipio más expuesto acústicamente a la actividad del aeropuerto, seguido por Madrid, San Fernando de Henares, Algete y Fuente del Saz. Pero estas afecciones apenas son en suelo urbano. No obstante, hay núcleos de población en desarrollo en Algete, El Molar, San Sebastián de los Reyes y Mejorada del Campo que en el futuro se verán afectados por la huella.