El Mundo - La Gaceta de Canarias
Uno de los 'puntos negros', con picos de 75 decibelios, se localiza en la Avenida Marítima /El Ayuntamiento estudia peatonalizar nuevas calles y crear 'pantallas vegetales' para rebajar la incidencia acústica
L. FELIPE ALFONSOLASPALMASDEG.C.– El 41% de la población de Las Palmas de Gran Canaria soporta niveles de ruido "por encima de los límites desables", establecidos en 70 decibelios durante el día y 50 por la noche. Esta es una de las conclusiones que se extraen del avance del mapa de ruidos de la ciudad que está diseñando el Ayuntamiento capitalino, y que se aprobará a finales de este mes una vez concluya la fase de exposición pública.
Este avance, basado en proyecciones sobre la densidad del tráfico rodado, revela asimismo que del total de ciudadanos afectados por ruidos que superan el nivel aconsejable, el 35,5% lo está por el tráfico que se registra en las calles de la ciudad, mientras que el 5,5% restante, por el que se concentra en los grandes ejes viarios, principalmente en las autovías que conectan la capital con el resto de la Isla, por donde circulan a diario más de 16.000 vehículos.
Según explicó el concejal de Desarrollo Sostenible, Néstor Hernández, uno de los "puntos negros" se localiza en la Avenida Marítima, donde se registran picos "preocupantes" de hasta 75 decibelios, sobre todo en horario nocturno.
A pesar de estos datos, Hernández dudó de que Las Palmas de Gran Canaria sea una de las ciudades más ruidosas de España, ya que por delante se situarían grandes capitales como Madrid, Barcelona o Sevilla.
Para rebajar los niveles más elevados de incidencia acústica, el Consistorio capitalino está estudiando la posibilidad de "disminuir la ocupación viaria del tráfico" peatonalizando nuevas calles, sobre todo en el entorno del barrio histórico de Triana, y crear "pantallas vegetales" mediante la plantación de árboles para amortiguar el ruido generado por los vehículos. No obstante, Hernández apunto que esta última solución sería de difícil aplicación "en el caso de la ciudad construida".
En cualquier caso, el concejal de Desarrollo Sostenible abogó por "abrir una reflexión" sobre las acciones a desarrollar a partir de ahora con el fin de mejorar la calidad ambiental en la capital grancanaria. En este sentido, Hernández dijo que "la oportunidad es buena", pues las propuestas que se concreten podrían introducirse en el Plan General Municipal de Ordenación (PGMO), que se está revisando en la actualidad.
Sin embargo, no será el próximo mes de junio cuando el Ayuntamiento disponga de un plan de acción definitivo que contribuya a rebajar los niveles de ruido.
Por otra parte, el edil anunció la creación durante este mandato del Grupo Especial Ambiental de la Policía Local (GEA), que se encargará de garantizar la aplicación de la normativa municipal sobre ruidos y calidad medioambiental. Lo que no adelantó el concejal es cuántos agentes conformarán esta nueva unidad policial, cuya creación estaba recogida en el programa electoral del PSOE.
Este avance, basado en proyecciones sobre la densidad del tráfico rodado, revela asimismo que del total de ciudadanos afectados por ruidos que superan el nivel aconsejable, el 35,5% lo está por el tráfico que se registra en las calles de la ciudad, mientras que el 5,5% restante, por el que se concentra en los grandes ejes viarios, principalmente en las autovías que conectan la capital con el resto de la Isla, por donde circulan a diario más de 16.000 vehículos.
Según explicó el concejal de Desarrollo Sostenible, Néstor Hernández, uno de los "puntos negros" se localiza en la Avenida Marítima, donde se registran picos "preocupantes" de hasta 75 decibelios, sobre todo en horario nocturno.
A pesar de estos datos, Hernández dudó de que Las Palmas de Gran Canaria sea una de las ciudades más ruidosas de España, ya que por delante se situarían grandes capitales como Madrid, Barcelona o Sevilla.
Para rebajar los niveles más elevados de incidencia acústica, el Consistorio capitalino está estudiando la posibilidad de "disminuir la ocupación viaria del tráfico" peatonalizando nuevas calles, sobre todo en el entorno del barrio histórico de Triana, y crear "pantallas vegetales" mediante la plantación de árboles para amortiguar el ruido generado por los vehículos. No obstante, Hernández apunto que esta última solución sería de difícil aplicación "en el caso de la ciudad construida".
En cualquier caso, el concejal de Desarrollo Sostenible abogó por "abrir una reflexión" sobre las acciones a desarrollar a partir de ahora con el fin de mejorar la calidad ambiental en la capital grancanaria. En este sentido, Hernández dijo que "la oportunidad es buena", pues las propuestas que se concreten podrían introducirse en el Plan General Municipal de Ordenación (PGMO), que se está revisando en la actualidad.
Sin embargo, no será el próximo mes de junio cuando el Ayuntamiento disponga de un plan de acción definitivo que contribuya a rebajar los niveles de ruido.
Por otra parte, el edil anunció la creación durante este mandato del Grupo Especial Ambiental de la Policía Local (GEA), que se encargará de garantizar la aplicación de la normativa municipal sobre ruidos y calidad medioambiental. Lo que no adelantó el concejal es cuántos agentes conformarán esta nueva unidad policial, cuya creación estaba recogida en el programa electoral del PSOE.
Las sanciones más altas en la actual ordenanza son de 600 euros
La ordenanza municipal de protección del medio ambiente frente a ruidos y vibraciones actualmente en vigor, y que fue aprobada en 2002, contempla sanciones máximas de 600 euros para las infracciones muy graves, 150 para las graves y 60 para las leves, además del precintado inmediato de aquellas instalaciones o actividades que superen los límites sonoros permitidos.
Sin embargo, esta ordenanza tiene los días contados, pues el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria tiene previsto elaborar durante el presente mandato un nuevo marco normativo que englobe todas las políticas medioambientales: limpieza, contaminación acústica y calidad del aire. "Esta es la tendencia de los Ayuntamientos de España en la actualidad", apuntó el concejal de Desarrollo Sostenible, quien no avanzó a cuánto ascenderán las sanciones en la futura norma.
Según Hernández, aprobar una nueva ordenanza municipal es "lo lógico", pues hasta ahora la actual normativa "se ha aplicado fundamentalmente a los locales de ocio" con el fin de garantizar el derecho al descanso de los vecinos.
La nueva ordenanza, que tendrá que ajustarse al resultado del estudio que se está realizando para elaborar el mapa de ruidos de la ciudad, "será la hoja de ruta para que, entre todos los servicios municipales implicados, podamos mejorar la calidad ambiental de esta ciudad", manifestó.
Sin embargo, esta ordenanza tiene los días contados, pues el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria tiene previsto elaborar durante el presente mandato un nuevo marco normativo que englobe todas las políticas medioambientales: limpieza, contaminación acústica y calidad del aire. "Esta es la tendencia de los Ayuntamientos de España en la actualidad", apuntó el concejal de Desarrollo Sostenible, quien no avanzó a cuánto ascenderán las sanciones en la futura norma.
Según Hernández, aprobar una nueva ordenanza municipal es "lo lógico", pues hasta ahora la actual normativa "se ha aplicado fundamentalmente a los locales de ocio" con el fin de garantizar el derecho al descanso de los vecinos.
La nueva ordenanza, que tendrá que ajustarse al resultado del estudio que se está realizando para elaborar el mapa de ruidos de la ciudad, "será la hoja de ruta para que, entre todos los servicios municipales implicados, podamos mejorar la calidad ambiental de esta ciudad", manifestó.
Fecha de Publicación: 24/01/2008 - 09:06:17
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